Jacqueline Lee Bouvier pertenecía a una familia de la alta sociedad neoyorkina y vivió el estilo desde muy pequeña, ella misma decía que su madre era muy estricta e inculcó a sus hijas la etiqueta, maneras, vestimenta y costumbres de la clase alta.
El interés en la moda le venía desde su padre, el corredor de bolsa John Vernou Bouvier II, conocido como Black Jack Bouvier, quien siempre se vestía de manera impecable con ropa hecha a la medida, y con un homburg, un sombrero parecido a la fedora. Jackie heredo un gran sentido de la elegancia y su gusto estuvo fuertemente influenciado por el tiempo que pasó en Europa, en donde aprendió a apreciar las creaciones de los diseñadores franceses.
Durante la campaña presidencial, Jackie usó diseñadores franceses, como Givenchy, Chanel y Christian Dior, lo que fue muy criticado cuando su marido llego a la presidencia.
Consciente de que el usar ropa de algún diseñador estadounidense favorecería la imagen de su marido, Jackie se dio a la tarea de encontrar un diseñador americano, dando así con el estadounidense nacido en Francia Oleg Cassini.
Jackie le dijo a Cassini que quería que la vistiera como si su esposo fuera el presidente de Francia. Se dice que hizo más de 300 trajes para Jackie, que fueron pagados por Joe Kennedy. El guardarropa concebido por Cassini tenía influencia de Givenchy y otros diseñadores franceses.
Cassini diseñó para Jackie en colores sólidos y brillantes que le favorecían a la Primera Dama. Adornaba sus creaciones con grandes botones para hacerlos más fotogénicos y Jackie se volvió conocida por los vestidos simples y geométricos, sin mangas y en línea A, así como por las mangas tres cuartos y sus mantillas.
A lo largo de su vida, Jackie adquirió piezas significantes de joyeríacreando asi una magnifica colección. Quizás la pieza que sea más recordada sea el collar de perlas de tres hilos.Otra de sus emblemáticas piezas es la conocida como el Berry Brooch un prendedor con la forma de un racimo de dos fresas cubiertas con rubíes y las hojas y tallos con diamantes, y que fue diseñado por Jean Schlumberger para Tiffany & Co.
Otras de las piezas fueron las pulseras diseñadas por Schlumberger, hechas con oro y esmalte que eran usadas por Kennedy tan frecuentemente que se les bautizaron como las “pulseras Jackie”.
Una de sus joyas favoritas eran los aretes de oro con esmalte blanco conocidos como los pendientes banana y, por supuesto, el anillo de compromiso que le dio John F. Kennedy definitivamente la pieza de joyería a la que le tenía más apego.
Después de ser Primera Dama, su estilo cambió dramáticamente, pero sin perder jamás la elegancia y el buen gusto que la caracterizaba.
De utilizar modestos trajes sastre y vestidos, adoptó pantalones anchos, faldas estilo gitano, mascadas Hermés y sus emblemáticos lentes oscuros.
Durante la campaña presidencial, Jackie usó diseñadores franceses, como Givenchy, Chanel y Christian Dior, lo que fue muy criticado cuando su marido llego a la presidencia.
Consciente de que el usar ropa de algún diseñador estadounidense favorecería la imagen de su marido, Jackie se dio a la tarea de encontrar un diseñador americano, dando así con el estadounidense nacido en Francia Oleg Cassini.
Jackie le dijo a Cassini que quería que la vistiera como si su esposo fuera el presidente de Francia. Se dice que hizo más de 300 trajes para Jackie, que fueron pagados por Joe Kennedy. El guardarropa concebido por Cassini tenía influencia de Givenchy y otros diseñadores franceses.
Cassini diseñó para Jackie en colores sólidos y brillantes que le favorecían a la Primera Dama. Adornaba sus creaciones con grandes botones para hacerlos más fotogénicos y Jackie se volvió conocida por los vestidos simples y geométricos, sin mangas y en línea A, así como por las mangas tres cuartos y sus mantillas.
A lo largo de su vida, Jackie adquirió piezas significantes de joyeríacreando asi una magnifica colección. Quizás la pieza que sea más recordada sea el collar de perlas de tres hilos.Otra de sus emblemáticas piezas es la conocida como el Berry Brooch un prendedor con la forma de un racimo de dos fresas cubiertas con rubíes y las hojas y tallos con diamantes, y que fue diseñado por Jean Schlumberger para Tiffany & Co.
Otras de las piezas fueron las pulseras diseñadas por Schlumberger, hechas con oro y esmalte que eran usadas por Kennedy tan frecuentemente que se les bautizaron como las “pulseras Jackie”.
Una de sus joyas favoritas eran los aretes de oro con esmalte blanco conocidos como los pendientes banana y, por supuesto, el anillo de compromiso que le dio John F. Kennedy definitivamente la pieza de joyería a la que le tenía más apego.
Después de ser Primera Dama, su estilo cambió dramáticamente, pero sin perder jamás la elegancia y el buen gusto que la caracterizaba.
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| Inspiraciones |
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| Su estilo no deja de imitarse |
De utilizar modestos trajes sastre y vestidos, adoptó pantalones anchos, faldas estilo gitano, mascadas Hermés y sus emblemáticos lentes oscuros.
La Jackie de los 70 usaba colores vibrantes y estampados, y hasta empezó a usar jeans en público. Su look de pantalones blancos sin cinturón con un cuello de tortuga negro por fuera fue y sigue siendo imitado por muchas mujeres.
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